
TRASCENDENCIA Ser leve, sentirse efímero, dócil al viento que marca mi destino, sin que yo pierda la verdad de mi identidad que no se encuentra, ni en la tierra firme ni en el cielo inmenso salvo en la salud de tu pensamiento.
TRASCENDENCIA Ser leve, sentirse efímero, dócil al viento que marca mi destino, sin que yo pierda la verdad de mi identidad que no se encuentra, ni en la tierra firme ni en el cielo inmenso salvo en la salud de tu pensamiento.
CON LA LENGUA TAMBIÉN SE JUEGA Debajo de la escafandra hay una salamandra. Debajo de un infortunio puede estar tu pecunio. Debajo del firmamento se esconde el esperpento. Debajo de una morada llora la desconsolada. Debajo de tu destino camina el campesino. Debajo de la barrera gime tu primavera. Debajo de un feldespato está el hijo de Lola pato. Y encima de la cortina las joyas de la Corina.
EL HOMBRE HIERÁTICO Ah! Hombre Hierático Hermético y Flemático Colérico y Estático Rígido como Torre de Catedral. Metódico y Elíptico Vesánico y Galénico Tiránico y Frenético Honorable como un Palacio Fantasmal. Que te den por el Angélico Por Morlaco Ecuménico Por Falsario y Volcánico Afincado en el Orto del Dineral.
RESISTENCIA Cassius Clay, Mohammed Alí, se declaró objetor de conciencia y se negó a ir a la guerra de Vietnam. No tenía nada en contra de los vietnamitas, pueblo maltratado y explotado como sus hermanos afroamericanos. Antes de firmar cualquier contrato -económico, emocional, matrimonial, laboral… deberíamos ser tan claros, valientes y contundentes, como lo fue Alí cuando vino a decir: no voy a defender los intereses de los que me maltratan. Desgraciadamente, muchos están atrapados y trabajan a favor de quienes los explotan.
PLOMO Los soldados agónicos, atrapados en las trincheras, llenas de barro, ratas y cadáveres putrefactos. Los generales, bien alimentados, en sus mansiones de retaguardia jugaban a soldaditos al asalto con sus miniaturas de plomo. El plomo de los soldaditos era el mismo que mataba a los soldados de verdad.
CYBERMAN Salí de la guerra vivo, pero mutilado, convertido en un ser ortopédico, en un hombre cibernético. Ahora soy capaz de oír el zumbido de una bala saliendo de un cañón. Y más aún: Saber la dirección que toma y la intención que tiene.
EL HOMBRE BONDADOSO Perpetra actos de bondad para ganar fama de hombre bondadoso. La bondad es un medio. El fin es la fama. “Yo soy un hombre bueno” -se repite delante del espejo mediático- Al oírle, un ligero temblor me eriza las aguas de la conciencia. Si quieres esconder tu maldad, pon cara de hombre bondadoso.
HIRO ONODA Por disciplina a la orden recibida, por el honor de la palabra dada, el teniente Onoda pasó 30 años sobreviviendo en la selva filipina antes de deponer las armas por orden de su superior, un anciano de 88 años, llevado a propósito hasta la isla remota. A finales de 1945 Onoda recibió la orden de no rendirse, de no suicidarse y de hacer una guerra de sabotaje. Mantuvo viva la idea del enemigo 30 años después de declararse la rendición de Japón. No estuvo solo. Durante muchos años le acompañaron dos soldados disciplinados a sus órdenes. La historia tiene un aura de dignidad que impide ver un fondo monstruoso. Podemos imaginar la cerrada espesura de la selva, su recogimiento amniótico, su mimetismo de hombre invisible, su tiempo cíclico de lluvias y mansedumbres, sus incursiones para buscar alimento y matar al primer despistado que no sabía que era enemigo de un soldado japonés que no sabe ni quiere saber que la guerra se ha acabado. Mató a 30 personas. Todo el mundo piensa que sólo un japonés es capaz de mantenerse en esa disciplina absurda y esclavista. Un italiano, un español, un francés… no podríamos encontrar ningún occidental que hubiera durado más de 5 años. Esa competición de disciplina monstruosa la gana un japonés. Aún hubo otro soldado Teruo Nakamura que se rindió 7 meses más tarde. Una maratón de resistencia que ganó Onoda, que llegó 7 meses antes al asombro del mundo y sus noticieros.
EL VENDEDOR DE PÁJAROS Vendo pájaros. El vuelo de los pájaros es una potente metáfora de la libertad. Para venderlos, debo capturarlos. Los pájaros enjaulados son una potente metáfora de la esclavitud. Así que ahora soy una potente metáfora de la contradicción. Pero sé que un día desharé este nudo moral. El día que venda todos los pájaros y me haga rico.
SONETO DEL MISÁNTROPO Qué quimeras me llevan, qué deseos, qué impulsos me remueven, qué contratos, qué ansias, qué motivos, qué sustratos del ser que me circunda de siseos. Oigo sus procelosos ajetreos dictando sus razones de arrebatos, entrando con desdén en mis zapatos, llevándome al final de sus rodeos. La gente para mí ya es muchedumbre ociosa de avidez y de costumbre que puebla los mercados de la nada. Me cansan sus asuntos demenciales miserables que alumbran sus fanales con voces de consigna masticada.