
A Antonio Muñoz Molina ensudecentededicación ¿Cómo es posible que Camilo José Cela calificara a Antonio Muñoz Molina de “doncel tontuelo” si es evidente para todos que Antonio Muñoz Molina es el hombre lobo de las Sierras de Úbeda?
A Antonio Muñoz Molina ensudecentededicación ¿Cómo es posible que Camilo José Cela calificara a Antonio Muñoz Molina de “doncel tontuelo” si es evidente para todos que Antonio Muñoz Molina es el hombre lobo de las Sierras de Úbeda?
“A todos los que usan pájaros en sus poemas o describen el glauco irisado de los ánades” Glück! vaya un trago! pensé cuando le dieron el Nobel de Literatura a esta señora agropecuaria.
gusto conmigo mismo, en el silencio, en la sombra, estando solo en mi nido, todos los demás me sobran. Me sobra la gente lerda, me sobra la inteligente, los cínicos, los astutos, los que van y los que vienen. No soporto la alegría de los bobos que jalean al señorito que paga la desgana de su fiesta. Ni a tantos desmemoriados que excusan a los que abusan con un gesto de soberbia porque una parte era suya. Fanáticos del beneficio, locos de su sola causa, forofos de la indecencia barriendo para su casa. A quienes creen los cuentos del patriota pesetero y cantan, con ilusión, el himno del cementerio. No los soporto, no quiero que me toquen el espacio, ni un segundo de mi tiempo, ni un bigote de mi gato. Sí, me voy haciendo viejo, y hasta el amor y sus líos dejo que vayan pasando y que me dejen tranquilo. Desnudo hasta de mí mismo, sin otra pasión que el dios que vive y que me desvela buscando por mi interior, una energía que encuentre en acto la redención de tanto sueño incumplido silenciando su valor.
“No es realista negar a los surrealistas. Esa negación es un síntoma del subconsciente. Su afloramiento es una acción puramente surrealista” Fríos Santos García Según Pablo d’Ors detrás de la puerta surrealista se esconde una logomaquia de palabras sin sentido. Detrás de la puerta dorsiana hay una congregación silenciosa rezando un menú de palabras masticadas.
A Carlos Vitale ensulucha El gran misterio de Carlos Vitale es: ¿Cómo un poeta tan largo, escribe poemas tan cortos?
A todos los borgianoadictos Tanto he fatigado el libro de Borges que quien ha quedado hasta el tigre, soy yo.
A Juan López-Carrillo ensuhonestidad ¿Qué hacemos tú y yo, Graco, francotiradores sin poder, si los cuatro poetas que nos leen callan como putas que temen perder a sus clientes?
A Nicanor Parra, enlasombra. En el mundo hay muchas Parras con miles de hojas y pocas uvas.
Oh! Demorada Belleza, tu cuerpo respira como el caballo y el mar visitados por la luna, una fortaleza sin defensa pues su poder es evidente, un trigal movido por la brisa dulcísima de la primavera, un olor que fascina a la higuera del sueño, el capricho de una sonrisa en el mármol demorado de la caricia o la reverencia. Oh Belleza Lúcida, los dioses existen, pues solo los dioses pueden modelar la arcilla de tu cuerpo, el barro fino y delicado que dan a tu carne la textura de un pergamino indostánico con el poema de un río escrito en el bosque del deseo, ese ejército imparable que nos visita en las noches desnudas de lebreles, sin perros que la ladren ni sátiros que la desperecen. Oh Belleza Salutífera, soy tu guardián de anhelos, tu guerrero de asaltos. Los dioses existen, no tan solo porque tu belleza deslumbra mi alma llena de devociones; también porque ellos han propiciado que tu vengas a mí como un don para mis manos de piedra endurecida, para mi boca de sed y enjambre desatado.