Paco Torrente 4 – día 87

He llegado muchas veces tarde en mi vida.
 
He llegado tarde al banquete de tus éxitos,
      sólo alcancé al óxido de los embutidos
      o la carcoma de las avellanas de Reus.
He llegado tarde a la infancia de mis hijos,
      ya habían pegado el estirón adolescente,
      ya estaban preparados para el reproche
      de que no estuve allí en los momentos decisivos.
He llegado tarde al amor de mi vida,
      ya estaba instalada en el mal uso de las costumbres,
      en la tristeza de las horas enjambradas de egolatría,
      en pensar que el amor consiste en estar,
      exclusivamente pendiente de su sensibilidad.
 
Llegué tarde a ti,
ya estabas demasiado usada.
No quiero extenderme, ya llego tarde al dentista.
 

Deja un comentario

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies