SONETO DE LA SUPERACIÓN Sin duda te mereces el amor de una nube, del pájaro que canta en el bosque, del príncipe que espanta la muerte, la serpiente y el dolor. Te mereces sin duda el esplendor de una vaca, la fuerza que levanta montañas, la alegría que decanta la sutil devoción del aspersor. El sufrimiento crece en la maceta de tu casa. Convierte la amargura en el aire de una flor que supura las heridas y cierra la maleta del pasado en el sótano escondido donde el bien se trabaja en el olvido.