EPIGRAMA 39
¿Cuántas tonterías debe cometer un hombre
para decir que es tonto?
¿Cuántas boberías para que la definición
de bobo se pegue a su piel?
¿Cuántas meteduras de pata
para que lo oficien de torpe?
¿Cuántas fechorías para nombrarlo facineroso?
¿Cómo estamos de contabilidad moral, Juanitus?
Ya sabes que los moralistas acostumbran a estrechar el cerco.
A veces, te sentencian por lo que no saben y se inventan.
Les basta con verte pasar por allí
para endosarte al muerto.
¡Por un gato que maté, me llamaron matagatos!
¡Ten cuidado, Juanitus, al gato ni tocarlo!