Ardo en las contradicciones. No tengo un deseo tengo un bazar. Odio y me olvido, no puedo perder el tiempo. Odio y perdono, no soy puritano o integrista. Soy lo más importante que conozco después de ti y el hambre insaciable, después del anochecer y su versión efímera. La amistad es una moneda. Con el paso del tiempo se valoriza o se devalúa, como la palmera del palmeral cuando el viento no sopla a su favor. Sin humor ya te puedes ir labrando un porvenir de asesino.