La golondrina – día 4

 


Veo a la golondrina
      entrar y salir
por los ojos del puente,
con sus vuelos rasantes,
giros inesperados,
recortes en el aire,
loops de aviador acrobático,
una alegría inverosímil,
      de un desprendimiento,
      de una felicidad
que me retrotrae a mi infancia.
 
Cuando quiero darme cuenta,
¿dónde está la golondrina?
desapareció de mi vista,
voló lejos, se perdió en un pasmo,
¿es aquel punto lejano
que deja un rastro de hombre perplejo
que no sabe
ni cómo, ni cuando, ni por dónde
se fue la golondrina?
 
     
 

 

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