Dolor, última forma del amor. Pedro Salinas Todos los viajes se realizan tres veces: el primero cuando se sueña, el segundo cuando se hace, el tercero cuando se recuerda. Así el amor que se vive cuatro veces: el primero cuando palpita en la incertidumbre, el segundo cuando llena la boca de fresas desatadas, el tercero cuando melancoliza las horas de la ausencia, el cuarto cuando la ruptura es abismo insalvable y se hace dolor.