Honor como una bandera libre de las maléficas intenciones del sátrapa que incendia consensos, que inquiere sangre de corazones nobles, para alimentar su sádica vocación de poder, los colores de sus ejércitos inclementes. Honor y memoria para el hombre que lo combate y sale desnudo y limpio de las zarpas feroces que quisieron abatirlo. Digan la verdad y proclamen su nombre.