EPIGRAMA 11 Leerte es como andar Por cansada vereda Palabras que no te abren Palabras que te cierran Versiones con amargas Visiones que se estrechan Bobadas y bastiones De batallas y guerras Coleópteros furtivos De nubes que te cercan Peligros de la nada Blandos como la cera Pretenden el fulgor Y solo son ideas Cenizas que no suman Infértiles maneras De insignes sobredosis De pérfidas soberbias Naderías del sueño Vagando por esferas, Ojos que nada ven Vacías calaveras Perdidas en las noches De efímeras veletas; Nada que nos eleve Sumidos en mantecas Signos que no respiran Nada que nos mantenga En lugares sagrados Hijos de las estrellas Rincones del amor Lares de la belleza Pérfidos y perdidos Entre signos, malezas, Rumbos, rayos erráticos, Desiertos y quimeras, Sentidos de las bocas Que apresan a sus presas Que ignoran sus palabras Que ignoran su nobleza Caminos de la vida Fertilidades ciertas Si el libro ha de ser libre Abran todas las puertas.