UN POEMA, UN BARCO. Un poema es un barco velero. Disponer de todos los elementos para una buena navegación. Afirmar el rumbo, una sintaxis más adecuada, un grado, un sextante, una rima interna, un equilibrio. Cuando tiras de una cuerda, de una palabra, todos los resortes se alinean, las significaciones que varían, los ajustes precisos para dar respuestas inteligentes a los hundimientos abisales de la canción, a los imprevistos que van surgiendo en el ámbito general en el que se circunscriben las emociones de una aventura. Entrar en un poema, subir a un barco.